miércoles, 26 de junio de 2013

Following

Hola a todos de nuevo. ¿Cómo va el verano? Para mí va a ser un verano algo atípico, porque voy a estar bastante más atareada de lo normal (todo sea por terminar la carrera, crucemos los dedos). En todo caso, podéis tener por seguro que intentaré actualizar con mayor frecuencia el blog a partir de ahora, a pesar de que creo que no podré igualar el número de entradas publicadas el año pasado por estas mismas fechas. Me gustaría poder publicar más de lo que lo hago, pero no me llega el tiempo para todo. Sé que sois comprensivos y os doy las gracias por ello y por seguir al pie del cañón en todo momento.

Y ya no me enrollo más, porque hoy quiero hablaros de una película que vi ayer, sacrificando un poco mis horas de sueño, y que me ha parecido brillante. Quiero advertiros antes de nada de que creo que se trata de una de esas películas sobre las que todo el mundo que la ve tiene una opinión: o la odia o la ama, no hay medias tintas. Para mí, eso dice mucho de una obra: si esta no provoca ningún efecto sobre quien la recibe es porque el trabajo no se ha realizado correctamente. Sin embargo, si la obra genera cierta controversia y recibe críticas positivas y negativas es porque ha logrado una conexión con quien la disfruta, y esta puede ser obviamente buena o mala según la persona que la vea en cada momento. Y me da la sensación de que, como digo, en este caso se cumple esta premisa.

La película se llama Following y está dirigida por Christopher Nolan, que si ya de por sí es un director cuyas películas son muy personales en este caso esta característica se ve acentuada por varios factores. Entre ellos, destacan el hecho de que esta sea su primera cinta, circunstancia que siempre suele motivar que todo sea más personal, y el escasísimo presupuesto con el que contó para rodarla (unos 6.000 euros). Si os digo que está rodada en 16 milímetros y en blanco y negro y que dura poco más de una hora, alguno ya se habrá echado para atrás y estará pensando que no vale la pena verla y que será una película aburrida. Nada más lejos de la realidad.

Following comienza con el relato en primera persona de uno de los protagonistas, un escritor que no termina de despuntar que se obsesiona con seguir a gente que se encuentra por la calle. Considera que esta práctica es buena para su profesión, porque le permite conocer rasgos de personalidad que luego aplicará para crear a sus personajes. En uno de esos seguimientos conoce al que será el otro protagonista masculino de la cinta, un ladrón muy particular, que le propondrá que le acompañe en sus fechorías, algo que terminará aceptando. Si bien en un principio parece que todo es favorable para el joven escritor, la situación irá cambiando a medida que avanza la historia, y todo se complicará irremediablemente.

Comprobaréis que la historia no es lo único original de la película. Su estructura tampoco obedece a la tradicional, y le da un aire de thriller todavía más acusado. El atrevimiento del director por hacer algo que se salga de la norma se agradece, sobre todo cuando eres aficionado al género y has visto muchas películas de este estilo. Engancha, sorprende y gusta. ¿Se puede pedir más? Pues sí: un buen ritmo y unos personajes muy bien construidos para lo poco que dura la película.

Para mí, este es el claro ejemplo de película que, sin contar con un gran presupuesto, es mejor y está mejor realizada que otras que sí tienen un buen respaldo económico pero carecen de alma. Si por algo destaca la película es por su apabullante personalidad y por buscar la diferenciación, y la conjunción de ambas se traduce en una ópera prima insuperable.

Os he comentado que la película puede general cierta controversia, pero por lo que he visto en Internet normalmente el resultado gusta, y mucho. Yo creo que, como poco, se merece una oportunidad, así que desde aquí os animo a que la veáis, ya que además si al final no os gusta no habréis perdido demasiado tiempo.

Hasta aquí el comentario sobre Following. Espero traeros más cosas pronto, aunque como siempre os digo os leo día a día. Y ya que estamos, os doy las gracias por vuestros comentarios y por los correos que mandáis haciendo sugerencias y valoraciones, sabéis que siempre las tengo muy en cuenta. Nos leemos.

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