sábado, 8 de diciembre de 2012

Dynamo: el mago

Hola a todos. Sin duda, hoy lo primero que tengo que hacer es daros las gracias. Ha sido increíble entrar en Blogger y ver las (hasta ahora) 75 visitas recibidas este viernes. Se une a la acogida excepcional que está teniendo este blog en general, pero sobre todo en los últimos tiempos. Es muy emocionante para mí ver que las visitas suben y suben, sobre todo porque es un proyecto muy pequeñito y personal, pero también porque creo que los temas que trato son bastante minoritarios y no se prestan a que haya un interés tan alto por él. En esto último desde luego parece que me he equivocado, y no puedo estar más contenta de haber cometido un error como este. De nuevo os doy las gracias, porque si escribir ya es gratificante de por sí para mí, más lo es sabiendo que me leéis y que, sobre todo, repetís visita.

Por otra parte, ya os he comentado que estos días estoy muy ocupada porque tengo mucha actividad relacionada con mis estudios, y me puedo pasar por aquí muy poco tiempo, y menos dedicarme a leer, ver series, películas, etc. Hasta estoy escuchando poca música en estas semanas, y eso sí que es raro en mí. De todos modos en cuanto me libere un poco de mis tareas volveré a dejar mis comentarios habituales, espero que con la misma regularidad que siempre.

Sin embargo, y aunque hoy he tenido muy poco descanso, he querido escribiros sobre algo que descubrí ayer y que me ha dejado muy impresionada. Y fue todo fruto de la casualidad, porque hace 24 horas no tenía ni idea de que existía la persona de la que os voy a hablar a continuación.

Ayer por la mañana en casa nos dimos un caprichito y nos levantamos más tarde de lo habitual, aprovechando el día festivo. Esto provocó que por la noche no tuviéramos demasiado sueño, así que mi padre y yo nos quedamos en el salón con nuestros ordenadores: yo hacía un trabajo y él leía la prensa. Pero en un momento determinado se acercó a mí para enseñarme un vídeo. No me dijo de qué se trataba, así que tuve cierta curiosidad, porque mi padre estaba muy interesado en que lo viera. Y entonces aluciné.

Al principio vi a un chico joven, algo desgarbado y flacucho que hacía algunos trucos habituales de magia: habilidades con monedas y botellas, billetes, llaves, etc. Me gusta la magia desde pequeña, pero tampoco me pareció que hiciera nada demasiado extraordinario como para que mi padre tuviera semejante entusiasmo. Hasta que entonces empecé a ver trucos que ya me llamaron más la atención. Primero, cuando lo vi caminar sobre las aguas del Támesis. Aún así, mi entusiasmo decayó un poco cuando mi padre pareció descubrir el truco y me pareció una teoría bastante lógica. Pero luego lo vi reducir un Iphone a un tamaño minúsculo y meterlo en una botella de cristal, y tras esto hacerlo volver a su tamaño original con un único golpe de mano. Después, borró su nombre de la tarjeta de crédito y puso el de un hombre que transitaba por la calle, robándole además su firma y descubriendo su número PIN. Todavía en shock, vi cómo parecía levitar frente al Cristo del Corcovado, ante la mirada atónita de los numerosos turistas que se hacían fotografías en el lugar. Por si esto fuera poco, es capaz de adoptar posturas imposibles para cualquiera, manteniendo el equilibrio como si tal cosa, y recuperando una posición normal de una manera totalmente natural. También vi cómo leía la mente a varias personas, que se quedaban confusas ante semejante hecho.

Pero el truco que más impactada me dejó fue el que hizo cuando desapareció de su chándal. Dynamo estaba en lo que a mí me pareció una especie de centro comercial, delante de varias personas, e iba andando normal. Al momento, se puso la capucha, siguió andando y, de repente, parece que se queda parado. Y ahí es cuando el chándal se desploma, porque nadie lo ocupa. Increíble.

Ya sé que todo esto es magia, y que tendrá trucos más o menos sofisticados para hacer todas estas cosas. Pero no me negaréis que es un soplo de aire fresco en un mundo que hace equilibrios entre lo tradicional y lo moderno, y que siempre tiende a tener un regusto algo antiguo. Y aquí es donde Dynamo (en realidad, Steven Frayne) se atreve a innovar y revolucionar el concepto de la magia, llegando a impactar a un espectador resabiado de los trucos convencionales.

Si queréis, podéis ver vídeos en Youtube en donde aparecen todos estos trucos y muchos más. También cuenta con un programa en el canal Discovery Max, y la casualidad ha querido que hoy me haya despertado con una entrevista suya en el portal de televisión Fórmula TV, cuyo enlace os dejaré a continuación: http://www.formulatv.com/videos/4382/dynamo-gusta-mago-juan-tamariz-grita-mucho-increible/. En fin, espero que os animéis a ver el trabajo que realiza este hombre, porque es genial y tiene un mérito increíble, además de que os divertirá y sorprenderá. En fin, espero que os haya gustado esta entrada y lo dicho, espero volver muy pronto para escribiros de nuevo. Hasta entonces.




2 comentarios:

  1. http://youtu.be/uzAVd2mIIzo. Es un resumen de sus trucos. Espero que os guste

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Genial tu vídeo, gracias por tu comentario y por leerme. Un saludo.

      Eliminar